miércoles, 8 de octubre de 2008

Google lanza su propio Celular superando a Iphone

El ingreso de Google en el mercado de los teléfonos celulares ha dejado de ser un rumor. El nuevo teléfono G1, desvelado esta semana por Google, inició una estrecha carrera con el iPhone de Apple, en un esfuerzo por captar parte del mercado de los llamados teléfonos "app" (de aplicaciones) - es decir, celulares que unen la telefonía inalámbrica normal con aplicaciones de datos.

Pero el G1 no será el mejor teléfono inalámbrico para todos. Mientras es claramente un competidor directo con el iPhone -en términos de apariencia, recursos y precio- se distancia del iPhone en importantes aspectos. ¿pero qué ofrece G1?

APLICACIONES
El G1 ha sido diseñado en todos sus detalles para funcionar con aplicaciones, tanto las populares "apps" de Google como las de terceros fabricantes. Google, por supuesto, tendrá la parte del león de aplicaciones ya listas al momento de lanzar el nuevo teléfono - desde Gmail y Google Maps hasta el creciente número de aplicaciones ofimáticas que ofrece en su suite de programas Google Docs. De acuerdo con esto, el G1 viene con un teclado - con juego de teclas estándar - algo más grande que la mayoría de los teléfonos celulares actuales. Este teclado deslizante se esconde bajo la pantalla LCD del teléfono cuando no está en uso. El teclado viene como agradable sorpresa para quienes nunca se pudieron habituar a los teclados "virtuales" de que están provistos otros celulares, tal como el iPhone de Apple. El teclado servirá muy bien para lo que bien puede ser la mayor sorpresa del G1: su sistema operativo de código abierto, llamado Android, para el cual todo desarrollador con conocimientos necesarios podrá crear aplicaciones nuevas. Compare usted esto con la política propietaria de Apple, con su sistema operativo iPhone, y se sentirá tentado a recordar el golpe que Apple recibió de computadoras compatibles con IBM hace muchos años, cuando Apple insistió en rechazar que terceros fabricantes desarrollaran hardware y software compatible con sus computadoras. La política de Google con Android resultará sin duda alguna en una lluvia de aplicaciones para su nuevo G1. El aspecto negativo de esto, puesto que Google tiene escaso control sobre desarrolladores ajenos a sus filas, es que la calidad de esas aplicaciones puede ser muy variable. En todo caso, a quienes usan los programas actuales de Google les agradará constatar qué bien trabajan éstos en el G1. En el nuevo teléfono, Google Maps, por ejemplo, funciona de maravillas. El uso de la vista calllejera (Street View) de Google Maps - que proporciona una visión real de los los barrios de una ciudad, a nivel de calles - facilita estupendamente la búsqueda de un destino en particular. ERGONOMIA Mientras el G1 se centra en aplicaciones que sugieren que el aparato ha sido hecho para amantes del teclado tradicional, los aficionados a las pantallas táctiles tampoco estarán decepcionados. La LCD del G1 es una pantalla táctil que puede usted usar para navegar en Internet y para usar muchos programas. El uso del teclado suele ser completamente opcional. En cuanto a diseño, el G1 es comparable en tamaño al iPhone de Apple, aunque el aparato de Google es algo más alto y más grueso. El G1 se siente en las manos sin duda alguna más ligero, más plástico que el iPhone. La interfaz Android se ve moderna y atractiva, más similar a una interfaz de sobremesa Windows en miniatura que la interfaz única y altamente táctil del iPhone, que trata de convertirse en extensión de la natural capacidad humana de ajustar las cosas con las propias manos. Tal como el iPhone, el G1 ofrece todo el paquete de recursos que se puede esperar de un moderno teléfono celular de último modelo: Wi-Fi, un navegador Web, un reproductor de audio, una cámara digital integrada, juegos, numerosas aplicaciones, GPS y correo electrónico. Notablemente, la cámara digital del G1 tiene una resolución de 3.2 megapíxeles, frente a los 2 megapíxeles del iPhone. No obstante, hay aspectos en los cuales el G1 simplemente no da tanto como el iPhone. La batería del G1, lamentablemente, tiene una vida de sólo 130 horas standby, mientras la del iPhone dura 300 horas, y la memoria básica del G1 es de 1 gigabyte (1 GB), mientras la del iPhone es de 8 GB. La memoria del G1 puede ser incrementada a 8 GB, mientras la del iPhone puede expandirse a 16 GB. El G1 tampoco tiene capacidad de ver vídeos directamente (streaming) como el iPhone, pese a que en el G1 se puede ver YouTube. El G1 tampoco tiene la posibilidad de sincronización con el PC. Por el contrario, Google espera que sea el usuario mismo quien sincronice sus contactos y calendarios a través de la web. Esto constituirá un obstáculo para quienes por su trabajo estén ligados a los servidores de Microsoft Exchange - es decir, al correo y el programa de administración de contactos de Outlook. El iPhone de Apple, por el contrario, es capaz de sincronizar con Outlook, con el añadido de actualización gratuita del software. Usuarios del G1 pueden sincronizar con GMail, el servicio de correo de Google, pero, a decir verdad, no hay muchas oficinas que reposen en GMail como principal servicio de correo. Curiosamente, el G1 carece asimismo de conexión para audífono. A cambio de ello, tendrá usted que usar la única conexión USB en el teléfono para conectar allí un audífono especial USB o recurrir a la ayuda de un adaptador USB de 3.5 mm para poder usar audífonos convencionales. Para peor de males, el único puerto USB del G1 se usa también para recargar electricidad, oír audio y sincronizar USB. Sobra decir que el G1 no será un reemplazo "plug-and-play" para el iPod u otro reproductor mediático portátil.

CONCLUSION
La estrecha vinculación del G1 con el creciente número de aplicaciones de Google y su sistema operativo de código abierto le granjeará las simpatías de quienes están ya vinculados a las aplicaciones de Google. Atraerá asimismo a tecnófilos que disfrutan probando múltiples añadidos y quieran tener a disposición un amplio repertorio de aplicaciones. Por otra parte, la apertura de G1 a desarrolladores de todo el mundo quiere decir que puede haber problemas con los controles de calidad, y que, en último término, quien acabe sufriendo sea el usuario. El G1, en breve, apelará a los amantes de los artilugios y a los guerreros de la tecnología. Quienes quieran un producto que simplemente funcione preferirán apostar por el altamente controlado iPhone de Apple.